miércoles, 1 de octubre de 2008

Te amo...


Te amo por lo que sos
y no por lo que tenés.
Te amo por tus virtudes y defectos.
Te amo porque cuando te veo,
todo se paraliza a mi alrededor.
Te amo por tu humildad y sencillez.
Te amo por tu locura y timidez.
Te amo porque le das sentido a mi vida.
Te amo por cada una de las cosas
que siento al verte.
Te amo por tu belleza expuesta y escocida.
Te amo por tus celos y confianza.
En síntesis TE AMO por tu forma de ser.

Aída Victoria Amarilla

Para vos...mi último poema.


Hoy escribo mi último poema.
Hoy se cierra mi corazón.
Hoy siento frío porque mi voló.
Hoy Aída amarilla dice adiós
a un amor imposible que nunca llegó.
Hoy la vida me enseña algo,
algo que siempre me he de acordar.
que el tiempo es oro
y no lo debo desaprovechar.
Hoy una persona de su vida me sacará
por grandes razones que debo aceptar,
porque millones de peros le llegué a dar,
porque en mi vida del todo quizo entrar.
Hoy lo vi cerca de alguien más
de una niña que me llegó a alejar
de la persona que más amaba
aunque sé que felicidad le ha de dar.


Aída Victoria Amarilla

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Cafayate


Sus relieves dibujan al Quilmas
sus cumbres adornan al cajón,
con añejas rocas volcánicas
en el Angastaco y su formación.

La perla de los Calchaquíes
con sus millares de primaveras,
bordea en el valle del encanto
por el Tucumán y sus fronteras.

Las nubes cantan a sus parrales
una tormenta de viñas florece,
madura la noche un río de uvas
en volcán de vinos, se amanece.

En sus valles llueve la arena
junto al viento su serenata,
alegres lunas bailan contentas
en hondos mitos color de plata.



Adolfo Damián Zerpa

Agua


Yo soy el canto de los ríos
mi voz se consume en el arenal,
mis labios se congelan al frío
en la alturas y en el mar.

Mi vida nació de una roca
parida de lajas y peñascos,
crecí con el vapor de las nubes
para bañar los valles y cardos.

Los vientos guiaron mis modales
sin escatimar las distancias,
disfrutando en lagos y humedales
sembrando vidas y esperanzas.

Mi canto creció de una burbuja
las alegrías son mi tormenta,
enhebraron un río de coplas
para regar a toda la cuenca.



Adolfo Damián Zerpa

Cerrillos


Lo nombro en el cerezo florecido,
en el hogar leña y en un piano,
en el huérfano sol de mis hermanos
y en lo que amamos lejos del olvido.

En la casa de adobes, dulces y vieja,
en otoños luces desgastadas
y en aquella muchacha no olvidada
por el viejo cantor de Tres Acequias.

Guarda Cerrillos bajo el cielo puro
una noble tibieza entre sus muros
y placidez de otoño en cada esquina.

Como un ciego que vuelve de la mano
búscalo en el amor de algún verano
y donde la nostalgia se termina.



Sergio Rodríguez

Valle


Hace una lluvia de tiempos
que vivo admirando su cielo,
en sus estrellas contemplo
un mar de lunas y desvelos.

Como la suerte de un viajero
desde el corazón se desgranan,
los anhelos de un forastero
que pasa dibujando un rosario.

El tiempo va mojando los días
en una hermosa gota de bondad,
sus aguas riegan la geografía
y crece un lago de felicidad.

Comienzan a brotar sus valles
reflejado en un cielo admirado,
en su barro duermen las estrellas
junto al mar de lunas, los sueños.



Adolfo Damián Zerpa

Encuentro


Debajo de los cielos de Orán
sobre la madera cósmica,
donde se gestan recitales
se forja el mundo de las letras.

Henchido por la variedad de voces
con el acento de su propio origen
en las orillas del Río Bermejo
se perfila la madurez del trópico.

Allí donde se tejen juncos y jazmines
con urdimbre de trinos de pájaros
florece el verbo de los poetas.

Ellos abren la puerta de tiempos nuevos
mientras la arena enhebra los versos
al enero pleno con sabor a mango,
llana las historias en cada habitante.

Brotan los poros del cosmos imaginario
en tierra caliente por el sol,
quedarán cuajados los recuerdos
de aquel mundo trovador.



Adolfo Damián Zerpa